viernes, 29 de diciembre de 2006

Mi nevera

Si de algo -de lo poco- puedo estar orgulloso de mi casa es de mi nevera. ¡Qué pedazo de nevera!

Lo he calculado y ocupa casi 1,50m cuadrado, más de lo que yo ocupo de pié y la mitad cuando estoy acostado, más o menos claro.

Aun no tengo cámara de fotos pero Sole, una compañera del trabajo de la tarde me va a dejar la suya para que os muestre como es mi zulo. Creo que en el fondo le tengo cariño, aunque no sea legalmente mío y solo esté en alquiler... Es como los pedos, huelen mal, pero los propios tiene categoría, un cierto caché, un porte que los hace distintos a los demás pedos, que simplemente huelen mal. Sin ir más lejos, ayer los míos olían como a abeto cerrado. Curioso.

Siguiendo con mi nevera. Es un armatoste completamente nuevo, la verdad es que es lo único decente de zulo, incluido yo. Estuve durante un tiempo pensando si podía venderlo sin que se enterase el propietario, pero creo que es demasiado arriesgado y tiene una gran fianza como para jugarsela, creedme.

La foto que véis es de los primeros días, cuando sólo tenía un trabajo y aun conservaba los amigos que he perdido por culpa de la falta de tiempo libre. Es triste pero es así, hay que reconocerlo y punto. Como veis, no hay comida, y eso es porque los amigos sólo traen bebidas y, para colmo, ni siquiera una puta cerveza de mierda... Y todo porque tuve principio de cistitis hace ya tiempo.

Ahora mismo, la nevera está más sucia, y salvo el limón reseco tradicional, dos bolsas de pasta del año del cachimpún, un trozo de queso y botellas de agua, no tengo más... Eso, si no contamos la mierda que tengo en el congelador, que un día explotó una cocacola ahí y no hay Dios que lo abra, ni ganas oye...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Te vas a quedar en los huesos jomio...

Anónimo dijo...

Esto promete XDDDDDDDD

Anónimo dijo...

Hace siete años que vivo de internet. Tan sólo hay cuatro formas de ganar realmente dinero: estafando -lo que es contraproducente a la larga- mediante el comercio electrónico, el juego y el sexo. Yo me dedico a esto último. El resto, lo de los emails y toda esa parafernalia infantiloide, no vale para nada. Usa la cabeza y llegarás a alguna conclusión.

San Precario dijo...

Anónimo, le he hecho caso.
¿Dice Usted que el sexo da dinero?
Debe ser que por eso soy pobre, de sexo... Rien de rien.